lunes, 22 de febrero de 2010

Panic

Las ventajas de ser un cíclope sentimental en los tiempos que corren son infinitas. Una sola perspectiva, la realidad de frente. En absoluto puede asemejarse a ser tuerto, para nada. Esos van cayéndose hacia los lados, inconscientes de la lateralidad, de cuanto acaece alrededor. Yo no atisbo dudas. La semana que viene me quedo solo, hasta que se decida que así debe seguir siendo. Lo único que me hace feliz del acontecimiento es que podré cenar sentado en una silla, que podré disfrutar de un comedor amplio, que invitaré a mucha gente a casa. Lo único no es poco, pero el caso es que me quedo solo porque mi hermano se embarca en la aventura de la neutralidad suiza. El muy capullo ha terminado erigiéndose como un ejemplo a seguir por el español de a pie (hace poco leí en las noticias que el español medio había muerto). Y se marcha sin haber hecho aquí todo lo que yo creo que es capaz de hacer, total, por no apetecerle. Pero esto sí, se larga a Suiza, un país neutral que, como él, no entró en guerra porque no debió apetecerle, porque mala hostia tenía y no poca. Y que no os vengan con monsergas porque esto es un hecho, lo demás son disfraces. Y quién sabe si después de los minaretes no nos prohiben también a nosotros, sucios españoles sin afeitar.
Vamos, que se va, y es bastante raro. El mayor en Suiza, el pequeño en Suecia, y yo haciéndome pajas con la idea de pirarme a Figueres. Ya llegará mi turno, ya.

Puesto que soy un cíclope sentimental hablo desde la objetividad que me otorga mi único ojo (en la cara y no en el culo), y tras este último extraño fin de semana saco alguna conclusión. Por partes:



1. Me fui a Razz solo sólo a hacerle una visita al Dj, porque estaba realmente animado. Conclusión: no estuvo nada mal, máxime cuando no gastas pasta, máxime cuando ocurren cosas. No lo volveré a hacer, lo de estar realmente animado.
2. Tuvo lugar el primer ensayo oficial de Grupo Depresión. Conclusión: joder, cómo molamos / me lío cuando tengo que cambiar el compás, o el tempo, o lo que sea. Lo volveré a hacer dentro de 2 semanas.
3. Que ayer escribí algo bonito para alguien. Conclusión: lo volveré a hacer otra vez el año que viene.
h. 3 conclusiones son suficientes para un único fin de semana.

Así que la semana que viene las cosas serán distintas, y podré espachurrarme en el sofá del salón tan tranquilo, sabedor de que mis dos hermanos están bien. Y eso también me tranquilizará aún más, así que, ¿quién sabe? Quizá de una vez por todas supero la mayor desventaja que supone ser un cíclope y es que a lo mejor, y sólo a lo mejor, esta vez acabo ganando.

1 comentario:

  1. Ah! es Depresión... Era una de mis dudas, si era Depresión o De Presión. Debe ser porque "presión" es de las palabras en las que más pienso últimamente.

    Te voy a poner "regulero" porque no entiendo lo de ser un cíclope, además, ya sabes lo que le pasó cuando creo que Ulises le destruye su único ojo. Mola tener dos ojos, te dan mayor lateralidad.

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